lunes, 5 de marzo de 2012

PLACER Y DOLOR

El otro día fui a visitar a N. Hacía una semana de nuestra última cita. Me abrió la puerta, me saludó y entramos en la cálida habitación de la izquierda después del pasillo. Dentro olía a mandarina. Me desnudé.


Minutos más tarde, tras la puerta cerrada, se nos podría haber oído decir:



- ¿Así?... ¿Directamente vas? -le dije.
- ¿Qué te esperabas? -digo N.
- No sé... que no fueras tan directo, que te aproximaras más lentamente...
- Pues no... ¿te duele?
- Sí, claro -dije

Y me entró una risa tremenda.

Esta conversación, es tan sólo una muestra de lo poco que hablamos N. y yo.

N. es nuevo para mi, tiene unos doce o quince años menos que yo y tiene unas manos firmes y una voz dulce. Es mi osteópata.

Acudí a él porque además de una hernia y un ciático pinzado, me había caído y me dolía mucho en el costado.
Bueno, lo que os decia: que a partir de mi primera carcajada -al oir nuestras propias palabras-, no pude evitar fijarme en cuánto tiene en común el dolor y el placer. Incluso en el vocabulario.

- ¿No se te ha desmayado nadie de dolor?- le pregunté al final - antes de quedarme sola y  después de que me dijera que  me quedara un par de minutos y me levantara despacito-.

- No, y espero que nunca se desmaye nadie.

- ... Pero es que duele mucho.

- Sí duele, sí. Ya sé... -dijo-  pero es cuestión de buscar el punto exacto y el nivel máximo de dolor soportable, y aguantar hasta que el musculo se relaja y ya...

Y me reí por dentro, pensando otra vez en el dichoso vocabulario. Me sonaba a Sado-Maso.
-¿Cúanto te debo? 

Y después de pagarle, nos  despedimos hasta la próxima cita.

Por el camino de vuelta pensé en que os lo tenía que contar y que mi hijo mayor al leerlo haría JUAAASSSS JUAAAS JUASSSSSSSSSSS... pero no. Se lo he dejado leer y me ha dicho que no le ha gustado porque hace poco ha visto un capitulo de "Dos hombres y medio" donde hacían una "bromita" parecida al respecto... en fin, que según él, el tema está muy visto. Pero yo, como él, nos escuchamos el uno al otro aunque acabamos haciendo lo que queremos.

Así que aquí está mi episodio. Y cuidaos las espaldas que duele muchísimo y sale muy caro!!!

2 comentarios:

  1. Anda que no... me habías dado una sorpresa!!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Anónimo: Va a ser que no. Eso no lo hubiera puesto!!! jejej. Feliz semana.

      Eliminar